15.3.17

Zaragoza y la recogida selectiva orgánica (3)

Cuando hablamos de reciclar, o de recogida pública de basuras, vamos a ver algunos ejemplos para poder comparar con Zaragoza. Cada ciudad es diferente, cada sociedad entiende de una forma distinta la responsabilidad ciudadana, pero debemos admitir que todo lo que sucede en Europa, nos afecta.

En Berlín por ejemplo la basura se recicla en un porcentaje muy elevado. Allí la basura se recoge una o dos veces por semana y se va alternando según los tipos de esta. El suelo de las calles está muy limpio pues los ciudadanos no tiran al suelo casi nada, pero las papeleras están llenas y muy sucias, pues la limpieza pública es mucho menor (y menos costosa) que en España. Estas imágenes son del centro de Berlín, del parque más grande de la capital, y de este otoño 2016. 

Los vecinos de Zaragoza no admitiríamos este servicio, pero los alemanes además de utilizar mucho más que nosotros las papeleras, admiten esta suciedad, para no pagar más impuestos para la limpieza. Pero fuera de estos puntos "sucios" no hay nada por los suelos.

Veamos ahora cómo es el servicio de basuras de la pequeña ciudad alemana de Wangen, de unos 30.000 habitantes. Cada hogar dispone de un cubo de basura con candado, en el que deposita su basura y lo saca a la calle un día a la semana. Los camiones de la basura cogen cada cubo, lo pesan y anotan el peso de la misma. Cada familia paga más si tiene un exceso de basura. El objetivo de este sistema es que haya menos basura. No hay cubos de basura en la calle y parte de ella si es voluminosa se lleva en coches hasta los varios puntos limpios, donde es gratuito depositarla.

En otras ciudades alemanas, también pequeñas o medianas, el sistema funciona de otra forma. Los Ayuntamiento reparten a los vecinos 3/4 contenedores individuales para recoger la basura orgánica, el papel, los plásticos y todo el resto de basuras, para que cada vecino seleccione en su casa las basuras. Según días se pasa a recoger un contenedor diferente de color. Y en los barrios tienen en unos puntos muy determinados contenedores generales para vidrio, latas metálicas y ropa. En los bloques grandes de viviendas, los contenedores son comunitarios y de diferentes colores según materia, se guardan en los bajos y los sacan los conserjes según el día que se marca. Nunca se recoge más de un día a la semana y cada tipo de basura (por ejemplo lunes la orgánica, miércoles los plásticos, jueves el papel, viernes el resto), y por ello la orgánica muchas veces se llega a pudrir en las propias bolsas. Este sistema en países con temperaturas altas no puede funcionar.

Pero vamos a añadir algunas particularidades que en España nos va a sonar un poco complicadas. El camión que recoge cada tipo de basura pasa un día determinada a una hora determinada y no por la noche. La basura no se puede dejar en la calle más que un poco de tiempo antes de que llegue el camión, pues si no es así además de la consiguiente bronca de los vecinos, te juegas una multa. Cada vecino en algunas ciudades tiene un contenedor de diferente color según basura y de distinto tamaño. Y se paga por la recogida de basuras según el tamaño del cubo. Más grande, más impuestos. El camión NO recoge la basura que esté en el suelo en bolsas. Tan solo la que esté dentro de los cubos. Si te sobra basura no la puedes dejar en bolsas fuera del cubo, la debes llevar a puntos limpios. Y los que más hacen por que este sistema funcione son tus propios vecinos. Las calles están limpias, no hay basuras en bolsas ni contenedores por las calles, y nadie se queja. La basura es tuya y la debes guardar en tu casa hasta que toca recogerla. O eso si, la puedes llevar con tu coche a los puntos limpios donde hay de todo tipo de contenedores para todo tipo de basuras.