28.5.16

Tras Sevilla y Pontevedra llegó Plasencia. Zaragoza nunca

El Ministerio de Fomento (de Madrid), la Consejería de Infraestructuras de la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento de Plasencia alcanzaron ayer en Madrid un compromiso que desbloquea definitivamente el inicio de los trámites para acometer la reforma integral de la Avenida Martín Palomino y la avenida de España en la ciudad de Plasencia.

Y os diréis vosotrxs: ¿Y qué tiene que ver Plasencia con Zaragoza? Pues es otra ciudad más que logra que una gran avenida urbana pero de titularidad del Ministerio de Fomento es entregada a su propia ayuntamiento y con dinericos, para que sea municipal y reformada. Es decir, lo mismo que en Zaragoza llevamos al menos una década reclamando en los mismos términos para la Avenida Cataluña sin ningún éxito. Es decir, reconozcámoslo. Todos los que hemos intervenido en este asunto desde Zaragoza somos unos zotes, unos incapaces, unos bobos de baba por no lograr lo que ya han logrado en Sevilla, Pontevedra y Plasencia. 

Que lo repito. "…PARA LA AVENIDA CATALUÑA DE ZARAGOZA". En mayúsculas, para gritar.

El Ministerio de Fomento, como propietaria de la travesía, autoriza a la Junta de Extremadura a licitar la redacción del proyecto, cosa que hará en las próximas semanas. Además, las tres administraciones implicadas firmarán en breve un convenio en el que se comprometen a asumir cada una un tercio de los seis millones de euros en los que está tasada inicialmente la obra, cuyo inicio, si se cumplen las previsiones apuntadas ayer, sería a mediados de 2017.

Por fin hay un acuerdo político que permitirá al fin adecentar una de las principales entradas a Plasencia, en la que además se encuentran ubicadas gran parte de las mayores empresas de la ciudad. Por el momento se trata de un pacto verbal que se plasmará en papel en los próximos días, primero con el envío de la autorización por escrito del Ministerio de Fomento para que la Junta de Extremadura saque a concurso el proyecto, y después con la firma de un convenio en el que se detallará la responsabilidad que asume cada administración, y cuyo borrador va a ser elaborado también por los técnicos ministeriales.

Por parte de la Junta de Extremadura estuvo en la reunión de ayer el director general de Infraestructuras, José Luis Andrade, quien recordó a la salida del encuentro que los presupuestos regionales de 2016 recogen ya una partida de 150.000 euros para la redacción del proyecto. La previsión plurianual de cuatro millones más, plasmada para 2017 y 2018 se ajustará el próximo año para reflejar las cantidades que, efectivamente, tendrá que poner el ejecutivo regional. Serán unos dos millones, lo mismo que el Ministerio de Fomento, y en la misma cantidad el Ayuntamiento de Plasencia, que asume la obra urbanística consistente en renovar las redes de abastecimiento y saneamiento en las dos avenidas. El gobierno local ya ha dicho que ese coste será sufragado por la UTE Aguas de Plasencia como parte del contrato de concesión del servicio.

Es decir que sin ningún acuerdo previo firmado, ni formalización, ni proyecto (!está sin licitar!), ni valoración final, en la ciudad de Plasencia (40.000 habitnates) se acuerda algo a lo que a Zaragoza (700.000 habitantes) se le niega. Y no solo a Zaragoza, sino a las Cortes de Aragón, Ayuntamiento de Zaragoza, Junta de Distrito del Rabal, Justicia de Aragón, a las numerosas propuestas en Congreso de Diputados y Senado y tras numerosísimas concentraciones, y manifestaciones vecinales.  Tras acuerdos similares en Sevilla o Pontevedra ha llegado Plasencia. ¿Cúal es el motivo de que nunca lleguen estos acuerdos a Zaragoza?