22.1.13

El Ebro viene crecido, encauzado y sin calado profundo

Tenemos el Ebro desatado, inundando tierras de labor en zonas cercanas a Zaragoza, complicando los barrios de la margen izquierda de Zaragoza que llevan algunos años reclamando una limpieza válida y profunda de los fondos del Ebro, llenos de gravas y sedimentos tras las obras de puentes y Expo en los años cercanos al 2008.

Lo malo de esta situación es que lo sabemos, lo hemos dicho, se han intentado actuaciones para dotar de profundidad al Ebro a su paso por Zaragoza, similar a la que siempre ha tenido. Si por obras mal realizadas se ha perdido calado del río, se debe —por seguridad— limpiar y simplemente dejar como debe estar, como estaba antes de las obras. Nunca se ha pedido nada que no fuera dejar el Ebro como estaba antes de las intervenciones en obras públicas.
Mientras tanto las diversas clases de patos que viven junto a nosotros, tienen que ir buscando orillas, para escapar de la riada.